Crear cuentos infantiles cortos no es tarea sencilla. A pesar de tener un menor número de palabras que otras historias más complejas, los cuentos infantiles cortos requieren de una mente imaginativa y ágil, que permita al escritor narrar y resumir su historia en pocas páginas, sin dejar de ser por esto potencialmente atractiva para su público objetivo.
La brevedad es una de las principales características de los cuentos infantiles. Ya que los niños a estas edades están empezando en el mundo de la lectura y una historia demasiado larga podría hacer perder su interés. Así que si te planteas escribir un cuento infantil con el objetivo de publicarlo, no puedes perderte este post.
Desde nuestra editorial infantil te contamos cómo crear cuentos infantiles cortos de principio a fin.
Índice del artículo
¿Qué son los cuentos infantiles?
Los libros infantiles son el primer contacto de los niños con la literatura, y una oportunidad de oro para despertar su entusiasmo hacia la literatura.
Un cuento infantil se puede definir como una historia breve y concisa, escrito con un lenguaje sencillo que facilita su comprensión.
En el momento de escribir y crear cuentos infantiles cortos es importante tener siempre en mente las características del público al que va dirigida nuestra historia.
Cuando somos pequeños, nuestra principal motivación es el juego. Por eso, un cuento infantil corto tendrá que ser lo más parecido a un juguete; con el que los niños se diviertan explorando sus ilustraciones y conociendo la historia de los personajes que están viendo en sus páginas.
Pero los cuentos infantiles van más allá de la diversión y en la mayoría de ocasiones también tratan de aportar una enseñanza a los niños. Es común encontrar transmisión de valores y moralejas muy útiles para su día a día, así como herramientas para mejorar la comunicación con su entorno.
Un libro infantil es una buena herramienta de aprendizaje, también emocional. Ya que no cabe duda de que la mejor forma de aprender durante la infancia, es mediante la diversión.
Aunque posiblemente, el mayor encanto de los cuentos infantiles es que despiertan la imaginación de los niños, un aspecto realmente importante para su desarrollo.
Por estos motivos, al crear cuentos infantiles cortos estamos haciendo una labor muy bonita y también muy necesaria.
¿Cómo crear cuentos infantiles cortos?
Si te preguntas cómo escribir un cuento infantil corto, probablemente ya tengas en mente una historia. Este es el primer paso, pero deberás ir dándole forma hasta tener frente a ti un libro llamativo y atractivo, que los niños (y los adultos) sientan interés por abrir y descubrir.
Inspírate con otras obras infantiles
¿Qué se ha escrito ya? ¿De qué forma publican los escritores sus libros y con qué tipo de ilustración o formato? Hacer un trabajo de campo previo te permitirá tener más herramientas para crear un cuento corto y cumplir tu sueño de publicarlo.
Leer otros cuentos te puede dar ese empujón final que te falta o ese toque de inspiración que no encuentras. Se trata de una buena forma de saber cómo ambientar la obra o de qué manera escribirla para transmitir lo que deseamos contar.
Los cuentos infantiles clásicos siempre son un buen referente y una gran fuente de inspiración. Pero si te interesa conocer las tendencias del momento o nuevos cuentos con los que inspirarte, en Rimpompante podrás encontrar un amplio catálogo de cuentos infantiles.
Céntrate en una sola historia
Como ya hemos comentado antes, una de las claves para saber cómo crear cuentos infantiles cortos es ser breve.
Existen diferentes tipos de extensiones en los cuentos infantiles cortos, y todas ellas son correctas. Lo realmente importante es que te centres en contar una única historia. Evita la tentación de hablar de otros personajes o añadir más escenarios de la cuenta. Esto lo dejaremos para otro tipo de publicaciones.
Entrelazar diferentes historias puede resultar difícil de asimilar para los niños y fomentar que pierdan antes el interés.
Deberás ser fiel a tu historia en la introducción, el nudo y el desenlace.
- La introducción sirve para presentar a los personajes (mejor pocos), situar la historia en un escenario y contar qué ocurre.
- El nudo del cuento infantil cuenta en qué consiste la historia y explica el problema con el que se encuentran los personajes.
- El desenlace es el final de la historia. El cuento infantil debe tener un desenlace feliz.
Si quieres que tu historia sea fácil de comprender intenta utilizar un lenguaje sencillo, con oraciones breves. La temática, mejor que sea de un tema cotidiano, con la que los niños se sientan familiarizados. Si la historia tiene lugar en pocas localizaciones y con pocos personajes, será más fácil de asimilar para los niños, y permanecerán más tiempo atentos y entusiasmados con el cuento.
Una forma de ser breve es evitar descripciones largas, profundizar en los personajes o tratar de contar una historia muy compleja.
Intenta que cada frase esté formada exclusivamente por lo imprescindible. Por otro lado, si al releer el cuento encuentras una frase que no aporta información importante para el entendimiento de la historia, puedes sentirte con la libertad de eliminarla.
Elige un título llamativo
Muchas veces nuestros clientes tienen dificultades para encontrar un título llamativo, que sea reflejo de la historia que hay detrás.
El título, junto al diseño de la portada del cuento infantil, tendrá un papel importante en la elección de este cuento frente a los otros muchos que el niño encontrará en la librería o portal digital.
El título debe impresionar y ser sencillo.
Si en los cuentos infantiles menos es más, en su título ocurre lo mismo.
Publicar un cuento infantil corto
Si crees que tu cuento está listo para ser publicado, o si buscas ayuda profesional para el diseño de las ilustraciones y maquetación de tu cuento, en Rimpompante queremos ayudarte.
Nuestra editorial infantil estará encantada de acompañarte en todo este proceso para que puedas ver tu libro publicado.
Ponemos a tu disposición nuestro equipo de expertos para que todo salga sobre ruedas. En Rimpompante nos encargamos de dar la forma final a tu manuscrito, asesorarte, publicar tu obra, distribuirla y difundirla.